Canelones de espinacas y jamón.

¡Buenos días a tod@s y buen comienzo de semana!:

Tengo la gran suerte de que mi hijo come de todo, y eso ayuda, la verdad. Primero porque no sufres, ¡Que veo yo a otras madres que las pobres lo pasan fatal!. Segundo, que no te tienes que pensar tanto qué hacer de comer cada dia, que si a uno no le gusta esto, que si al otro no le gusta aquello, etc...¡Qué sufrimiento!

De todos modos, siempre hemos de camuflar las verduras un poco, sobre todo las de sabores un poco más fuertes, como es el caso de las espinacas. Ya os lo digo, no es mi caso. Pero aun así, por si acaso, estos canelones cumplen con el objetivo propuesto. Entran por el ojo y las espinacas, aunque se notan y se ven, quedan bastante rebajadas de sabor gracias a la mezcla de los demás sabores.

 

Ingredientes:

Para unos 20 canelones

• 20 láminas de canelones.( utilizo las que se meten en agua caliente pero no hay que hervir)
  
• 1 paquete de espinacas congeladas.
  
• 1 paquete de taquitos de jamón (100 Gr)
  
• 2 dientes de ajo.
  
• 150 ml de tomate frito.
  
• Aceite de oliva.
  
• Queso para gratinar.
  

Para la bechamel:

• 50 gr de mantequilla.
  
• 2 cucharadas de harina.
  
• Leche.
  
• Sal, nuez moscada.
  

Preparación:

Llenamos una fuente de agua muy caliente (la que sale del grifo) y vamos introduciendo las láminas de pasta una a una. Las dejamos al menos 15 minutos pero hay que remover de vez en cuando. Cuando se reblandezcan las sacamos y las extendemos sobre un paño de cocina limpio.

Pelamos y laminamos los ajos y en una sartén los ponemos a dorar con un chorrito de aceite. Cuando comiencen a tomar color, agregamos las espinacas descongeladas y bien escurridas. Dejamos que se refrían y unos minutos antes de apartar hay que añadir los taquitos de jamón. No debemos apartar antes de que se haya evaporado todo el agua.

Rellenamos los canelones con las espinacas y los vamos colocando en una fuente para horno con una base de tomate frito. A continuación, hacemos la salsa bechamel. En un cazo ponemos la mantequilla con cuidado de que no se queme. Añadimos la harina y dejamos refreír sin parar de mover. Cuando se tueste y cambie de color (se pone color avellana) vamos añadiendo leche sin dejar de remover. Añadiremos leche hasta que veamos que la salsa tiene la consistencia que deseamos. Debe ser como una papilla de bebe espesita. Ponemos sal y un poco de nuez moscada rallada.

Con la salsa bechamel cubrimos los canelones. Espolvoreamos con queso de gratinar e introducimos en el horno a 200º hasta que se dore.

¡Ya me contareis!

TRUCO: si quedan grumos en la salsa bechamel batimos con la batidora y ¡Listo!